Dicen que los flechazos existen, que aunque se desee evitarlos la atracción que generan lo hace imposible. Creo que algo similar nos pasó a nosotros con los Pirineos.
Eramos jóvenes, disfrutábamos de la montaña dentro de un grupo scout del que guardamos recuerdos maravillosos. Tuvimos la suerte de hacer muchos montes rodeados de amigos y de monitores que deseaban transmitirnos su amor por la montaña, pero cuando llegamos a Pirineos y sufrimos sus etapas intensas hubo quién puso fin a esa relación y quienes nos quedamos marcados de por vida.
Puede que hiciéramos un break durante una etapa, la universidad, la búsqueda del trabajo, los hijos… demasiadas cosas que apartan otras, pero cuando sigue dentro de tí llega un momento en que vuelve a salir.
Y en esta ocasión una gran oportunidad nos trajo de nuevo a pirineos casi sin darnos cuenta. Nos vamos a Isaba, a disfrutar de una Borda fantástica que el Ampa del colegio de mis hijos pone a disposición de todos los padres que lo deseen. El camino no deja de llenarse de gente fantástica de la que seguir aprendiendo y este fin de semana fue una muestra de ello.
Los Pirineos tienen tantas rutas como días y noches desees pasar en ellos. En esta ocasión vamos a realizar una ruta circular que no conocíamos, el bosque de Gamueta. Un recorrido circular de 8 Kms que aunque está señalado con dificultad media puede hacerse con niños.
La salida comienza en el mismo refugio de Linza, el mismo lugar en el que podemos empezar la increíble subida a la mesa de los tres reyes y otras ascensiones a las cimas más conocidas de la zona. Se puede pernoctar en el mismo refugio o para los que llevamos la casa a cuestas en cualquiera de los parkings que hay allí mismo, también en el camping de Zuriza, donde sale la pista al refugio.
marcas amarillas y verdes que ya hemos visto. Llegamos aquí a un panel explicativo de nuestro recorrido.